CAPÍTULO 2 / A
Medioambiente
Fortalecer las prácticas sustentables en su operación y aportar a la conservación de salares, humedales, flora y fauna altiplánica son algunas de las principales acciones que realiza Minera El Abra en materia medioambiental.
Minera El Abra no solo trabaja para disminuir el impacto que pueden tener sus operaciones en el medioambiente, sino que promueve la conciencia ambiental en cada una de sus áreas de gestión con iniciativas dirigidas tanto a su personal como a las comunidades vecinas a su faena.
En esta línea, realiza constantes revisiones de sus prácticas medioambientales e impulsa proyectos, estudios y monitoreos científicos para generar y difundir información relevante que permita mejorar los métodos de conservación del medioambiente además de apoyar el desarrollo de conocimiento de la biodiversidad, siendo un aporte tanto para las comunidades como para las autoridades.
En una labor constante por mejorar las prácticas ambientales y cumplir con los requisitos legales y reglamentos, durante 2019 Minera El Abra actualizó la certificación de su Sistema de Gestión Ambiental según la Norma ISO 14001:2015. Con este mismo espíritu, en mayo actualizó el Plan de Manejo de Residuos Peligrosos, que realiza un control y seguimiento de estos desechos desde su generación hasta su disposición final.
Durante este año, también se llevó a cabo una auditoría interna de todos los compromisos ambientales, tales como el cumplimiento de resoluciones de calificación ambiental, revisión de desviaciones en auditorías anteriores y requerimientos legales. Los resultados de la auditoría indicaron que la compañía tiene como fortaleza su programa de biodiversidad, la automatización del suministro de aguas en el Salar de Ascotán y las iniciativas que tienen para controlar las emisiones de polvo en suspensión en el área de chancado, entre otras.
Durante este período, la Gerencia de Medioambiente tramitó la Declaración de Impacto Ambiental para utilizar el ex rajo Turquesa como botadero de lastre, lo que contribuirá a disminuir la emisión de material particulado y responder a las necesidades de la operación. Asimismo, logró la aprobación ambiental del proyecto “Modificación del Depósito de Baja Ley, ROM I”, lo que permitirá extender la vida útil del depósito hasta el año 2029. Esta extensión de tiempo permitirá extraer, aproximadamente, 34.000 toneladas de cobre fino.

Cursos de capacitación en Metrología y almacenamiento de sustancias peligrosas
Minera El Abra tiene la convicción de que mejorar las prácticas ambientales y apuntar hacia un desarrollo más sustentable de la operación va de la mano con ofrecer instancias de formación y mejora continua en las prácticas de sus trabajadores y trabajadoras. En esta línea, en junio de 2019 se dictó el curso de “Metrología y Seguimiento y Medición”, cuyo objetivo fue proveer capacitación sistemática sobre las mediciones mecánicas, eléctricas y químicas, siguiendo lo establecido en procedimientos internos. Este curso busca que el personal, adecuadamente calificado, cuente con los elementos y criterios necesarios para asegurar la calidad de las mediciones, así como la cadena de trazabilidad.
A su vez, la Gerencia de Medioambiente ha desarrollado un programa de gestión interna para cumplir con las capacitaciones. Este año, el personal de la compañía y de empresas colaboradoras, fueron capacitados en habilidades y competencias técnicas para interactuar y almacenar sustancias peligrosas, puntualmente en lo concerniente al decreto supremo 43, el que hace referencia a su manipulación y almacenamiento.

Sello de Eficiencia Energética
El Sello de Eficiencia Energética es un instrumento validado internacionalmente que destaca a las organizaciones que priorizan la implementación de sistemas de gestión de la energía. Entregado por el Ministerio de Energía y la Agencia de Sostenibilidad Energética, en 2019 Minera El Abra fue galardonada con el reconocimiento denominado “Sello Silver”. Esta categoría reconoce a empresas que han implementado un proyecto o iniciativa de eficiencia energética y que, además, cuentan con un Sistema de Gestión de la Energía.
Desde hace tres años en El Abra se trabaja para incrementar la eficiencia energética en diversas áreas con iniciativas como el mejoramiento de los bancos de condensadores para las bombas de Sulfolix y para los transformadores de chancado fino, entre otras. El proyecto destacado por el sello fue el “Open Top Capping”, desarrollado para el proceso de producción de cátodos de cobre. Los capping son conductores de cobre que se encuentran en las celdas electrolíticas al interior de la nave de electroobtención y forman parte del circuito donde viaja la electricidad para la obtención de cátodos de cobre. La implementación de nuevos capping ha ayudado a reducir las pérdidas de energía que se producían por mal contacto, siendo un aporte para la eficiencia energética de toda la operación.

Plan de conservación de sitios arqueológicos en conjunto con comunidades
En noviembre de 2019 comenzó un trabajo en conjunto con la comunidad de Conchi Viejo para actualizar la información sobre el estado de los sitios arqueológicos, patrimoniales e históricos identificados dentro del área de influencia de Minera El Abra. Este proyecto, que se extenderá por todo 2020, desarrollará evaluaciones arqueológicas de conservación y actualizará el Inventario de Sitios Arqueológicos. El trabajo de recolección de información se realizará mediante diversas visitas e inspecciones visuales de personas de la comunidad y de expertos en la materia.

Plan de manejo ambiental de la Vertiente 11
En 2019 se siguieron desarrollando actividades asociadas al plan de manejo de la Vertiente 11 (V-11), ubicada en el sector sur del Salar de Ascotán, en conjunto con la comunidad de Ascotán. Este proyecto, que comenzó en 2010, implementa acciones de monitoreo y manejo ambiental con el fin de recuperar la cobertura vegetal de especies características en ese sector.
El trabajo de la comunidad en el manejo de la vertiente es esencial y consiste, entre otras cosas, en monitorear su estado, hacer limpieza de residuos plásticos y otros que –por acción del viento o terceros– llegan a la vertiente, e implementar y mantener el regadío, así como reunirse con expertos para definir cómo trabajar y hacer mejoras en el estado de conservación de la zona.
Además, incluye el monitoreo permanente de las especies endémicas del salar, como el pez Orestias ascotanensis, conocido también como Karachi, y el sapito de Philippi. Otra especie endémica que ha tomado protagonismo en el Salar de Ascotán es el caracol Heleobia ascotanensis, que está siendo objeto de estudios genéticos para determinar si la separación geográfica entre las vertientes ha logrado un proceso evolutivo en la especie. Por otro lado, en la recuperación de coberturas vegetales del salar, el monitoreo se concentra principalmente en dos especies de flora nativa, la Zameioscirpus atacamensis (cojinete) y Puccinellia frigida.
Las principales actividades desarrolladas en 2019 correspondieron a la restauración de la Vertiente 11 a su cauce original, la recolección de semillas de Zameioscirpus atacamensis en la vertiente control para los trabajos en el 2020, y el replante de brotes y plántulas de esta especie elaboradas en el laboratorio piloto de la Gerencia de Medioambiente. Las dos primeras actividades se lograron con el éxito esperado, sin embargo los brotes de Zameioscirpus atacamensis replantados en la Vertiente 11 no tuvieron los resultados que se buscaban, principalmente por causas ambientales como erosión eólica, evaporación y oscilación térmica, condiciones características de ecosistemas de puna.
De acuerdo a lo anterior, este año, la Gerencia de Medioambiente realizó una importante inversión en potenciar la elaboración de individuos de esta especie, mediante la instalación de un invernadero en el Salar de Ascotán, donde se replicarán todas las etapas de su ciclo de vida bajo condiciones controladas con el fin de obtener individuos de la especie Zameioscirpus atacamensis adultos aptos para su trasplante en la V-11.

Laboratorio piloto
Como una medida complementaria al Plan de Manejo de la Vertiente 11, la Gerencia de Medioambiente instaló un laboratorio piloto con el fin de profundizar el conocimiento y estudiar a la especie Zameioscirpus atacamensis. Actualmente el laboratorio está realizando un proyecto que comprende la estratificación de las semillas hasta la obtención de plantas juveniles, con la intención de que estas puedan subsistir sin problemas en condiciones silvestres. Dado el ciclo de vida de estas plantas y los tiempos que presenta, el laboratorio tiene como objetivo tener plantas maduras y autosuficientes para ser relocalizadas en el sector de la Vertiente 11 el segundo semestre de 2021.

Plan de biodiversidad
Con la intención de establecer lineamientos y mecanismos para la conservación de la biodiversidad del territorio donde opera Minera El Abra, la Gerencia de Medioambiente lleva a cabo un plan de biodiversidad, cuyos objetivos son:
• Identificar las principales especies de flora y fauna, y su relación con los componentes abióticos.
• Caracterizar los potenciales impactos ambientales adversos en el área de emplazamiento de la actividad.
• Determinar y jerarquizar las medidas de mitigación, restauración y/o compensación, de ser necesarias, para cada impacto identificado.
Este plan involucra a todo el personal de Minera El Abra y a las empresas contratistas y sub-contratistas que desarrollen actividades, con la intención de informar y prevenir un potencial impacto ambiental negativo dentro de áreas con valor ambiental, social y/o cultural.
Para definir las medidas de prevención y mitigación de impactos a la biodiversidad, una de las primeras acciones de este plan, fue levantar información sobre el número y tipo de especies que habitan el sector. Tras este levantamiento, se ha podido determinar que, para el componente flora, existen 23 especies en el Sector Mina-Planta y 8 especies en el Salar de Ascotán, todas ellas de origen nativo. En el componente fauna, en el Sector Mina-Planta se identificaron 30 especies, de las cuales el 30% se encuentran en categoría de conservación. Para el Salar de Ascotán, se caracterizaron 26 especies de fauna silvestre, distribuidas entre mamíferos y aves, de las cuales un 42,3% (11 especies) está en categoría de conservación. De estas especies, 8 están categorizadas como “En Peligro” o “Vulnerable”.

Proyecto de reciclaje en Calama
Con la intención de generar conciencia en la comunidad sobre los problemas sociales, ambientales y económicos que generan los distintos tipos de desechos, Minera El Abra junto a una empresa externa, ejecutan un proyecto de reciclaje que ha habilitado siete puntos limpios en la ciudad de Calama. El proyecto, además de ofrecer infraestructura para facilitar el reciclaje en colegios, oficinas y residencias, busca incentivar a la comunidad a cambiar el sistema de manejo de residuos, enseñándoles a separar y clasificar sus desechos para mejorar sus hábitos y prácticas de reciclaje.

Censo de Flamencos Altoandinos
La Corporación Nacional Forestal (CONAF) lleva más de 30 años haciendo seguimiento y censos de tres especies de flamencos que habitan en el norte de Chile: Parina grande (Phoenicoparrus andinus), Parina chica (Phoenicoparrus jamesi) y Flamenco chileno (Phoenicopterus chilensis). Minera El Abra apoya la realización de este seguimiento participando de los monitoreos en los salares de Carcote y Ascotán. Para esto ha instalado estaciones de monitoreo en ambos salares, además de registrar los avistamientos y comportamientos de los flamencos y realizar observaciones de otras especies que habitan los salares para levantar información relevante para su protección. Estos monitoreos se realizan dos veces al año, en febrero y en agosto.

Monitoreo Pez Karachi
Desde 2010, Minera El Abra realiza monitoreos semestrales del pez Karachi (Orestias ascotanensis) en cinco vertientes del Salar de Ascotán. Esta especie endémica de la Región de Antofagasta se distribuye en las zonas de menor salinidad de las vertientes, agrupándose en cardúmenes asociados a las plantas acuáticas (macrófitas), las cuales les proporcionan refugio y alimentación. El pez Karachi presenta un estado de conservación “En Peligro” de acuerdo a la legislación vigente, por lo que los monitoreos son de interés para verificar la abundancia y robustez de estos peces con el paso del tiempo, así como para determinar medidas que puedan ayudar a su conservación.
Estudio de caracol Heleobia ascatanesis
Actualmente Minera El Abra apoya el estudio genético y morfológico de esta especie de caracol, el cual realiza una empresa externa junto con el Laboratorio de Genética y Evolución de la Universidad de Chile. El objetivo de este proyecto es aumentar y difundir su conocimiento científico, específicamente en su evolución como individuo (filogenia), su clasificación en el reino vegetal (taxonomía) y su distribución geográfica. El Heleobia ascatanesis habita el Salar de Ascotán y se encuentra en la categoría de conservación “En Peligro”. En 2019 se comenzó con la obtención de muestras de la especie desde 13 sectores distintos del salar y fueron enviados al Laboratorio de Genética y Evolución de la Universidad de Chile, donde se realizará la extracción de ADN, genotipificación, análisis de secuencias y estudio de morfometría.

Estudio de crecimiento de Humedales Altoandinos
Como parte de sus compromisos ambientales, Minera El Abra realiza un estudio de tasas de crecimiento anual de humedales, el que consiste en el monitoreo de las variables ambientales en siete humedales distribuidos en las zonas altoandina, precordillerana y desierto interior de la Región de Antofagasta. Los humedales de Amincha, Cebollar, Machuca, Putana, Tocorpuri, Turi y Lasana, son estudiados desde 2016 con el objetivo de determinar su capacidad de carga pastoril y tomar medidas de manejo que permitan un uso sustentable de cada uno de ellos. Luego de tres años de monitoreo se han podido registrar más de 90 especies de fauna, siendo dos de ellas endémicas: el sapo de Phillipi y la lagartija de Paulina, además de 44 especies de flora. Los resultados de este estudio, que se extenderá hasta 2020, se publicarán en una guía técnica científica de flora y fauna de cada uno de los sitios estudiados, información que ayudará tanto a autoridades como a las comunidades aledañas a aumentar el conocimiento sobre estos ecosistemas y realizar un manejo sustentable de ellos.